Dagda: deidad pancelta. Tenía diverso nombre en cada lugar. Deriva de Dagdevos (que significa "deidad múltiple o polifacética"). Es el omnipotente dios de los druidas y druida él mismo es el señor de la sabiduría.
Es el dios absoluto; guerrero, artesano, agricultor. Druida supremo, posee un caldero mágico en el que puede revivir a los guerreros muertos en batalla. Po¬see además un arpa mágica y maneja la rueda de la vida. Trajo del mundo superior la piedra del destino y la espada de Nuada. Poseía cuatro palacios en las pro¬fundidades de la tierra y bajo las colinas huecas, y do¬nó dos a dos de sus hijos. Le dio uno a Lug, y otro a Ogme. Se guardó dos para sí, el principal de los cua¬les era muy grande y estaba lleno de maravillas. Pero su hijo Angus se lo arrebató, ofendido porque había quedado excluido del reparto. Cuenta la leyenda que Angus se lo pidió prestado por un día y una noche. Cuando terminó ese plazo, Angus dijo que su padre se lo había dado para siempre, porque todo el tiempo consistía en un solo día y una sola noche, que se suce¬dían una al otro eternamente. Dagda debió entregár¬selo, pues aunque era el dios supremo, podía ser ven¬cido por la astucia. También era padre de Badb, diosa celta de la guerra; Brigit, diosa del fuego y de la poe¬sía; Ogma, dios de la literatura y de la fuerza; y Donn, dios de los muertos.

Angus MacOgg: Angus es el arpista de los Tuatha de Dañan. Hijo de Dagda, su nombre significa el hijo de la virgen, en sentido laico. Es el dios del amor, la juven¬tud y la belleza.

Badb: se la asimila con frecuencia a la faceta de la ira, en la temible y malévola trinidad llamada Morrigan. Su arquetipo es una diosa guerrera; se encuentra asociada con la muerte, la destrucción y la guerra. Al¬gunos la asimilan con la letal hada irlandesa Bean shide (en inglés Banshee), la cual solía aparecer don¬de alguien estaba próximo a morir. Hermana gemela de la irlandesa Ernmas, se la conoce también como la encargada del Caldero de la Muerte del mundo infe¬rior, en el cual se funden las almas humanas después de la muerte y antes de la resurrección. Cuenta la le¬yenda que será la responsable de provocar la destruc¬ción del período terrestre del ser humano cuando vier¬ta el caldero que convertirá al planeta terrestre en un desierto estéril y deshabitado. Era invocada para for¬talecer los contactos espirituales y conocer las vidas pasadas. Se dice que su invocación permite también conocer, a quienes lo deseen realmente, la fecha y ho¬ra exacta de su muerte. Sus símbolos son el cuervo, la guadaña y el báculo.
Balor: era un cíclope. Su vida y reinado dependían de que mantuviera cerrado su ojo, ya que con él podía matar a cualquier ser vivo que mirara. Esto era el re¬sultado de una maldición que le arrojó su padre cuan¬do era niño, por espiar en su cuarto de magia. Según la leyenda, Balor se trabó en combate con su nieto, Lugh, quien le arrojó con su honda una piedra que hi¬zo que el único ojo, atravesando la nuca, volara hasta el cielo.
Bean-Bha: no se tiene mucha información de esta diosa guerrera, excepto que protegió a la isla Erin de los invasores. Forma parte de la trilogía de diosas irlande¬sas, junto con Eire y Fothla. Bean Bha constituye el as¬pecto terrenal de las tres. Según la tradición, fue una fa¬mosa hechicera. En los rituales era invocada para inten¬sificar las cualidades de liderazgo en las batallas, mante¬ner la tradición y ayudar en las artes mágicas humanas.

Brigit o Brid: era tan amada y popular que la Igle¬sia no pudo desterrarla; entonces acabó convirtiéndola en Santa Brígida de Irlanda. Era una poetisa y, por lo tanto, los poetas la adoraban. Era además sanadora. Un lado de su cara era feo pero el otro era muy bello. El significado de su nombre era Flecha de Fuego.

Diancecht: patrono de la medicina. Amaba a sus dos hijos, Airmid y Miach, hasta que éstos lo superaron. El dios, irritado, mandó matar a Miach, mientras que Airmid huía. En la tumba de Miach crecieron hierbas medicinales que, se decía, curaban todas la enfermeda¬des. Airmid las clasificó según sus propiedades curati¬vas. Su padre nuevamente envidioso las desordenó; por eso hoy no se pueden curar todas las enfermedades.



Eire: ha sido el nombre de Irlanda desde siempre. Se la consideraba protectora de la isla Esmeralda. Hija de Dagda y Delbaeth, la magia de Eire es muy poderosa. Arroja hacia sus enemigos bolas de barro, que caen transformadas en cientos de guerreros luego de tocar el cielo. Es la esposa de MacGreine y su nombre significa "hija del sol". Se invoca por sus cualidades de liderazgo y en recuerdo de las tradiciones. Sus atributos son el ar¬pa y el trébol.